Somos un grupo de creyentes llamados a ser guerreros:
intercesores para la gloria del Señor, antorchas en este mundo de oscuridad.
Luchamos en oración por la unidad y el despertar espiritual del pueblo de Dios
a levantarse y pelear por la conquista de las almas ubicadas en la esfera de
influencia de cada uno y la propagación del evangelio a través de todo nuestro
territorio.
Nuestra meta es alcanzar a ser: Una iglesia unida, una familia.
Identificada con los demás y con sus necesidades, con los que necesitan una
ayuda idónea para salir adelante en las pruebas y en los momentos difíciles de
sus vidas. Una iglesia en la que el mundo pueda ver a Cristo reflejado en sus
miembros. Una iglesia que no sea neófita. Que se prepare para no entrar en la
apostasía de estos tiempos. Una iglesia sumisa. Completamente verdadera y fiel
llevando a cabo todos los planes, todos los propósitos, todo lo que Cristo a
ordenado que se haga. Una iglesia internamente identificada. Que todos estén
identificados, todo en común, tu problema es mi problema, tu necesidad es mi
necesidad, identificada con el dolor ajeno, así como Cristo nuestro Rey de
reyes y Señor de señores. Una iglesia fortalecida.
Nuestro manual de normas es: La
Biblia, la Palabra de Dios, única regla de fe y práctica, gobierno y
disciplina. Creemos en un solo Dios verdadero que hizo todo lo que existe y se
ha manifestado al mundo en Jesucristo como el unigénito del Padre, y actúa a
través del Espíritu Santo. Que Jesucristo es Dios. Que el Espíritu Santo es
Dios. Que todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios, por tanto,
están en necesidad de salvación. Que hay un solo medio de salvación provisto
por Dios, y es a través de Jesucristo. En el bautismo en agua. En la
observación de la Santa Cena .En el bautismo del Espíritu Santo. En la sanidad
divina disponible para todos los creyentes. Que la Iglesia de Cristo consiste
en todos aquellos que han recibido a Jesucristo como su Salvador personal. Que
todos los muertos resucitaran unos a vida eterna y otros al castigo eterno. En
la segunda venida de Cristo.
Esperamos que todos los miembros tengan: Compromiso con la
visión, Esfuerzo de mejora constante, Orientación a servir a la gente, Respeto
a las normas morales y éticas, Responsabilidad, Honestidad, Trabajo en equipo, Respeto
mutuo, Comunicación abierta, Sinceridad.